Machu Picchu en la mira: ¿Turismo masivo amenaza la joya inca?
Machu Picchu: ¿De maravilla a destino sobreexplotado?
Machu Picchu, la emblemática ciudadela inca ubicada en Cusco, Perú, se encuentra en el centro de la polémica. Un reciente informe de Travel and Tour World (TTW) la ha incluido en una 'lista negra' de destinos turísticos que, a pesar de su popularidad, ya no valen la pena visitar. La razón principal: el sobreturismo, los altos costos y el impacto negativo en su invaluable patrimonio cultural y natural.
El informe detalla cómo Machu Picchu, antes un sueño para muchos viajeros, se ha transformado en un destino caótico. El flujo masivo de turistas, impulsado por tendencias virales y la búsqueda de la 'foto perfecta' para redes sociales, ha provocado largas filas, precios exorbitantes y una experiencia, en muchos casos, decepcionante.
Mientras que en el primer bimestre del año, Machu Picchu se consolidó como el destino más visitado de Perú, con un crecimiento del 16,7 % respecto al 2024, este éxito conlleva un riesgo significativo de daño irreversible a sus estructuras arqueológicas, caminos incas y ecosistema circundante.
Contraloría alerta sobre el exceso de aforo
La Contraloría General de la República ya había advertido en mayo de 2025 sobre esta situación crítica. Según sus informes, el ingreso de visitantes a Machu Picchu supera constantemente el aforo permitido, lo que acelera el deterioro de la ciudadela.
La respuesta del Ministerio de Cultura
Ante la creciente preocupación, el Ministerio de Cultura ha negado categóricamente los rumores sobre un posible aumento del aforo a 27 mil visitantes diarios. En un comunicado oficial, la institución aclaró que la capacidad de carga actual se mantiene en 4.500 visitantes en temporada baja y 5.600 en temporada alta, según la Resolución Ministerial N.° 404-2024-MC. Asimismo, aseguraron que cualquier modificación de esta capacidad estará sujeta a estudios técnicos rigurosos y a la coordinación con MINCETUR para actualizar el estudio de capacidad de carga vigente desde 2015.
Gobernador de Cusco exige el control regional
El gobernador regional de Cusco, Werner Salcedo, ha expresado su enérgica crítica hacia el Ministerio de Cultura, responsabilizándolo directamente de la mala imagen que Machu Picchu está proyectando a nivel mundial. Salcedo exige que la administración de la ciudadela inca sea transferida al Gobierno Regional de Cusco, argumentando que el centralismo está perjudicando gravemente la conservación y preservación de este patrimonio de la humanidad.
El gobernador ha anunciado que en la próxima reunión de la Unidad de Gestión Machupicchu demandará el inicio inmediato de las acciones para que Machu Picchu sea administrada desde Cusco y ha solicitado a todas las instituciones cusqueñistas que se sumen a esta exigencia.
El futuro de Machu Picchu: ¿Un turismo sostenible es posible?
La situación de Machu Picchu plantea un debate crucial sobre el futuro del turismo en sitios históricos y naturales. ¿Cómo equilibrar la promoción turística con la protección del patrimonio? ¿Es posible un modelo de turismo sostenible que beneficie tanto a la economía local como a la conservación del entorno?
La respuesta a estas preguntas no es sencilla, pero requiere un esfuerzo conjunto de las autoridades, la comunidad local, los operadores turísticos y los propios visitantes. Es fundamental implementar medidas como la limitación del aforo, el aumento de los precios de las entradas para disuadir el turismo masivo, la promoción de rutas alternativas y la concientización sobre la importancia de respetar el patrimonio cultural y natural.
El futuro de Machu Picchu depende de la capacidad de encontrar un equilibrio entre el turismo y la conservación, garantizando que esta maravilla del mundo siga siendo un destino inspirador para las futuras generaciones.
- Limitar el aforo: Establecer un número máximo de visitantes por día para evitar la saturación.
- Aumentar los precios: Disuadir el turismo masivo mediante tarifas más elevadas.
- Promover rutas alternativas: Ofrecer opciones menos concurridas para diversificar el flujo de visitantes.
- Concientización: Educar a los turistas sobre la importancia de la conservación y el respeto por el patrimonio.