Britney Spears, la icónica estrella del pop, estaría considerando mudarse al Reino Unido en medio de crecientes preocupaciones por su bienestar. A sus 43 años, la intérprete de "Baby One More Time" se siente bajo una "enorme presión" en su hogar en California y busca un nuevo lugar para "llamar hogar".
¿Intervención familiar inminente?
Según informes, Britney teme que su familia, liderada por su padre Jamie, esté planeando una nueva intervención para frenar su comportamiento errático reciente. Esta preocupación surge tras una serie de eventos que han generado alarma entre sus fans y allegados.
La vida de la artista ha tomado un giro complicado tras la publicación de las memorias de su ex esposo, Kevin Federline, que incluyen afirmaciones perjudiciales sobre la madre de sus dos hijos. Se dice que sus hijos se han reconciliado con su abuelo Jamie, quien también está en contacto con la madre de Britney, Lynne, y con el propio Kevin. Esto ha alimentado los temores de Britney de que estén formando una alianza para intentar ayudarla.
Un escape al otro lado del charco
Una fuente cercana a la cantante reveló a The U.S. Sun: "Britney ha dicho que quiere vivir en Inglaterra. Ha estado diciendo a su círculo íntimo que una mudanza al extranjero o alejarse de Los Ángeles podría ser algo bueno pronto. Londres sería su destino soñado".
La situación se agudizó cuando Britney fue vista saliendo de un bar de vinos en las afueras de Los Ángeles con una copa de champán llena, antes de aparentemente subirse al volante de su coche y marcharse. Aunque su equipo insistió en que no estaba bebiendo alcohol, las imágenes preocuparon a muchos, mostrando a la estrella desaliñada y con un aspecto que generó inquietud sobre su estado general.
¿Un nuevo comienzo en Londres?
La posibilidad de un traslado al Reino Unido podría significar un nuevo comienzo para Britney, lejos de las presiones y controversias que la rodean en Estados Unidos. Sus fans esperan que este cambio le brinde la estabilidad y el apoyo que necesita para superar este momento difícil.
- Mudanza al Reino Unido como posible solución.
- Preocupación por una posible intervención familiar.
- Impacto de las memorias de Kevin Federline.
