Sri Lanka: Piden Millones por Masacre Tamil de 1989. ¿Justicia Tardia?
Las víctimas tamiles de la masacre de Valvettithurai de 1989, perpetrada por la Fuerza de Mantenimiento de la Paz de la India (IPKF), buscan una compensación de 4.500 millones de rupias (USD $15 millones). Esta reclamación histórica, presentada ante la Oficina de Reparaciones de Sri Lanka, representa un paso significativo en la búsqueda de justicia para uno de los episodios más devastadores del conflicto armado.
Un reclamo detallado y sin precedentes
El informe de reparaciones, elaborado por el International Truth and Justice Project (ITJP) en colaboración con el Comité de Ciudadanos de Valvettithurai, detalla una evaluación financiera exhaustiva de las pérdidas sufridas por las víctimas, sus familias y la comunidad en general. La compensación se calcula por la pérdida de vidas, lesiones y destrucción de propiedades, incluyendo los intereses acumulados durante los últimos 35 años.
Según el informe, se adeudan 29,7 millones de rupias a los familiares de las 66 personas fallecidas en la masacre, mientras que 1,38 millones de rupias corresponden a las 36 personas heridas. Los daños a viviendas, comercios y equipos de pesca suman 57,5 millones de rupias, lo que eleva la suma combinada a 88,7 millones de rupias al valor de 1989. Ajustado por los intereses desde agosto de 1989 hasta mayo de 2025, el total asciende a 4.500 millones de rupias.
¿Responsabilidad del Gobierno de Sri Lanka?
El Consejo Nacional de Paz (NPC) respalda la iniciativa del Comité de Ciudadanos de Valvettithurai, argumentando que el gobierno de Sri Lanka tiene la responsabilidad de proteger a sus ciudadanos, incluso cuando el daño es infligido por actores extranjeros que operan con consentimiento gubernamental. El NPC señala que la entrada de la IPKF en Sri Lanka fue el resultado del Acuerdo Indo-Lanka, firmado con el consentimiento del gobierno de Sri Lanka.
El Director Ejecutivo del NPC, Dr. Jehan Perera, afirma que las reparaciones no son solo demandas financieras, sino también reconocimientos de que las vidas perdidas importan y compromisos para prevenir la repetición de tales atrocidades. Destaca que el hecho de que esta demanda se presente 37 años después de los asesinatos no es una aberración, sino que simplemente muestra que el tiempo por sí solo no cura las heridas que nunca han sido reconocidas.
La presentación de este reclamo de reparación marca un momento crucial en la búsqueda de justicia para las víctimas de la masacre de Valvettithurai y plantea importantes interrogantes sobre la responsabilidad del gobierno de Sri Lanka en la protección de sus ciudadanos.